Es posible que ahora quede en evidencia el verdadero objetivo de la creación de ArBus, una empresa estatal, manejada por La Cámpora a través de Intercargo, que debía ofrecer un servicio de micros para empleados y pasajeros entre Aeroparque y 6 puntos estratégicos de la ciudad.

El lanzamiento, hace menos de un año, fue a toda orquesta, con fotos de varios funcionarios, como Mariano Recalde de Aerolíneas y Cecilia García de Intercargo, colgados de los pasamanos. Para arrancar con el negocio el Estado puso 32 millones de pesos solo para comprar 15 micros cero kilómetros, carrozados especialmente y dotados, como insistían los partes de prensa, con aire acondicionado, wi fi y televisión abierta. También tomaron 55 empleados. Pero algo no funcionaba. Los micros, lo podía ver cualquiera, iban y volvían vacios o a lo sumo con uno o dos pasajeros. Ahora se conoció que en este tiempo la empresa tuvo gastos por 13 millones y solo ingresos declarados por 3,6 millones. Es probable que la demanda ahora aumente. Los primeros empleados de Aerolíneas de Bouchard 547 y Perú 2 comenzaron a mudarse a las nuevas oficinas construidas para la empresa en Aeroparque. El traslado, además de demorado, es lento y resistido. Para los empleados no es lo mismo Perú y Florida o Bouchard y Lavalle que Aeroparque. ArBus pasará ahora a tener un cliente cautivo. Aunque también, es justo reconocerlo, es una solución para los empleados que podrán viajar por la compañía de Intercargo usando la SUBE y a una tarifa especial de $ 5. Negocio cerrado.

Fuente: SGR Comunicaciones
02/07/2015

 

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